El Poder de la Decisión

Photo of author
Escrito por Raul Ferrer

¿Te ha pasado que de repente te levantas con algo en la mente donde tomas una decisión y no hay Dios que te haga cambiar?

Si te ha pasado eso, ese es el momento en donde debes tomar el paso más pequeño o una tarea significativa al respecto para que sientas que tu decisión comenzó a tener frutos.

Muchos de nosotros tomamos una decisión y lo primero que hacemos es establecer un plan. Yo soy partidario de ese proceso, pero a la misma vez he caído en la trampa del análisis parálisis.

Yo comencé este website en el 2021 con varios artículos que me tomaron semanas en prepararlos antes de sentirme cómodo en publicarlos, pensando que deben de quedar perfectos y del agrado de las personas.

Estoy seguro, que muchos de ustedes han pasado por algo similar, posponen las cosas o planifican meticulosamente todo. No es una crítica porque muchas veces enfrentamos situaciones que tienen más prioridad o simplemente no tenemos el tiempo.

La realidad es que muchas veces no hemos llegado a ese punto donde te dices “no más”. Esto se lo dices a todas las excusas que te has dicho, las objeciones de las personas y decides tomar el rumbo que tus instintos te dictan. No hay vuelta atrás y en el proceso debes actuar, planificar y ajustar.

Cuando tomas una decisión, actúa y pon a prueba los pasos que tienes en la mente. No los dejes como un saco de boxeo. Vas a poder saber más temprano que tarde si esos pasos eran los correctos o si son los que te van a traer más cercanos a los resultados que quieres.

Convierte eso en un hábito.

En mi caso, el pequeño paso que he tomado es escribir cuando se me ocurra una idea como si estuviera hablando y ayudando a una de mis amistades.

No esperes, sea lo que sea, hazlo ahora.